Caracas. – El poder en Venezuela es realmente controlado por 10 enormes grupos fuertemente armados, y no por el Estado, según se reveló en el ForoChat Conflictos Armados en Venezuela, organizado este martes 1 de junio, por la Oficina del Comisionado para la Organización de las Naciones Unidas, Miguel Pizarro.
En el evento contó con la participación de un panel de especialistas compuesto por la periodista e investigadora Ronna Rísquez, el experto en política exterior y seguridad Andrei Serbin, el director de la ONG Fundaredes, Javier Tarazona, y el comisionado presidencial para los Derechos Humanos, Humberto Prado.
10 mil hombres armados
Según explicó Rísquez, la expansión de estos grupos criminales se debe a “la creación de una gobernabilidad criminal, donde cada clan ocupa una zona y la maneja bajo sus propias reglas”.
Precisó que a nivel nacional operan unos 40, pero diez de ellos son los principales por el número de hombres, el poder de fuego y las actividades ilegales manejadas.
De acuerdo a estas características, las disidencias de las FARC lideradas por el guerrillero Gentil Duarte van de primeras, seguidas por el ELN, y en el tercer puesto está el “Tren de Aragua”.
La mega banda de “El Coqui” ocupa el cuarto puesto, y el colectivo “Tres Raíces” el quinto.
Los grupos criminales ubicados al sur del país como el “Sindicato Perú”, “El Ciego” y “Tren de Bolívar” se sitúan de sextos, y el séptimo es para la organización delictiva de “Johan Petrica”.
En los últimos tres puestos figuran bandas que azotan el estado Zulia principalmente, como “Los Meleán” y “Los Urabeños”.
“Estas mega bandas y grupos guerrilleros utilizan entre 40 a 100 hombres, y poseen armas de alto poder como fusiles AK-103, FAL y rifles AR15”, explicó la periodista, cuyos informen calculan hasta 10 mil hombres armados entre todos estos clanes a nivel nacional.
En el caso del “Tren de Aragua”, la periodista sostiene que controla unos 3 mil hombres, y se financia con “negocios impensables, porque nadie se imagina el alcance que tienen”.
Por su parte, los dominios de “El Coqui” se extienden a cinco parroquias que bordean al Palacio de Miraflores.
Estado fallido
El punto en común entre los grupos criminales que protagonizan el conflicto en Apure, y los que manejan el terror en la capital y otras regiones del interior, según lo analizado por el panel de expertos en el foro, es que asumieron un control que debería ejercer el gobierno de Nicolás Maduro.
“Los cambios de discurso que venían manejando voceros oficiales tanto del Gobierno como de las FANB, en cuanto a prepararse para un escenario de seguridad interna en lugar de una invasión de Estados Unidos, demuestra que ya sabían lo que se venía”, asegura el analista Serbi.
Rísquez asevera que “el repliegue de las fuerzas armadas en Apure demostró que el Gobierno nunca controló ese estado”. Mientras, Serbi sostiene: “El mensaje es claro: quien logre dominar su zona, tendrá el control de las actividades económicas en esa región”.
Igualmente, el especialista destaca la falta de apresto operativo exhibido por las FANB en Apure, evidencia también la pérdida de control del Estado venezolano, que en este caso viene a constituirse en un Estado fallido.