Caracas.- Una presunta donación de 1,5 toneladas de pescado, originalmente destinada para el área del comedor, fue almacenada en la cava destinada a la refrigeración de cadáveres en el Instituto de Oncología Dr. Luis Razetti. El hecho fue denunciado por Mauro Zambrano, representante del Sindicato de Hospitales y Clínicas en Caracas, quien detalló que la situación se registró el pasado fin de semana.
Zambrano expuso que gran parte de la proteína animal se descompuso y el fuerte olor motivó la deposición de las bolsas. También aclaró que la cava aún no ha sido estrenada para el almacenamiento de cadáveres. Sin embargo, alertó que esta irregularidad supone un incumplimiento de los protocolos de higiene que se deben seguir en una instalación hospitalaria.

«Es inadmisible. La mañana del lunes el Hospital Oncológico Luis Razetti amaneció con un olor putrefacto que se regó por todos los servicios del centro de salud. Cuando los trabajadores pidieron la inspección descubrieron que el olor se debía a una supuesta donación de 1.500 kilos de pescado que iban a ser usados para la alimentación de los pacientes y fueron almacenados en las cavas recién instaladas, que estaban destinadas a la refrigeración de cadáveres», aseguró.
El sindicalista relató que al consultar las razones para el inadecuado uso de las instalaciones, la respuesta fue que las refrigeradoras que están operativas en el departamento de Nutrición resultaron insuficientes para la cantidad de pescado. El espacio, además de ser diseñado para la preservación de cuerpos, también funciona para el resguardo de material de las biopsias.
«A los obreros les dijeron que las cavas de nutrición no eran suficientes y por eso usaron esas neveras. Alertamos que se está poniendo en riesgo la vida y la salud de los pacientes, violando todas las medidas de higiene», subrayó.
Continúa el colapso
Las malas condiciones de funcionamiento del hospital han sido alertadas desde hace más de dos meses por pacientes, médicos, enfermeros, bioanalistas, empleados y obreros de ese centro asistencial, localizado en Cotiza, al noroeste de Caracas.
LEE TAMBIÉN:OPS LLAMA A EXTREMAR MEDIDAS PARA PREVENIR EL DENGUE TRAS FUERTES LLUVIAS
Las fallas en la dotación de insumos, como medicamentos para aplicar quimioterapias y reactivos para practicar exámenes, así como el sostenido deterioro de la infraestructura debido a la falta de mantenimiento correctivo y preventivo, ocasionaron que a inicios de septiembre los trabajadores declararan la suspensión de la consulta externa, es decir, solo se atendían casos de pacientes con historia clínica en el establecimiento.
Los constantes hurtos registrados desde noviembre del año pasado son otro de los aspectos que, como denunció el personal de bioananálisis de la institución, han incidido en la merma del servicio, que por su capacidad instalada fue creado para atender la mayoría de las patologías de cáncer desde el diagnóstico hasta la fase de remisión, como se conoce a la etapa de recuperación en la que no se detectan nuevas células cancerígenas.