Caracas.- El Departamento de Estado de Estados Unidos difundió un comunicado en el que registra una serie de casos de corrupción y de violaciones de derechos humanos cometidas por Nicolás Maduro, quien gobierna Venezuela pese a que lo desconocen 54 países de la comunidad internacional.
En la comunicación, divulgada este 15 de abril, el Departamento de Estado de Estados Unidos enfatiza que Maduro ha “violado sistemáticamente los derechos humanos y la dignidad” de los ciudadanos venezolanos, incluso resaltan que el gobernante ha saqueado los recursos naturales del país y que sus políticas públicas, basadas en un modelo político económico de corte socialista, condujeron a la nación a una ruina económica, dejando atrás los años de prosperidad que la caracterizaban.
El Departamento también hizo énfasis en las denuncias sobre ejecuciones extrajudiciales y torturas cometidas por algunos organismos, como la Fuerzas de Acciones Especiales (Faes) de la Policía Nacional Bolivariana y el Servicio Nacional Bolivariano de Inteligencia (Sebin).
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El departamento estadounidense recordó que Nicolás Maduro ha realizado prácticas a espalda de la Constitución, como el adelanto del proceso de elección de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), quienes no cumplían con requisitos para ocupar el cargo, luego de que la oposición logró llegar a la Asamblea Nacional (AN) en elecciones libres en 2015.
Los funcionarios del máximo tribunal, juramentados bajo un proceso irregular por Diosdado Cabello, entonces presidente de la Asamblea Nacional y segundo vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), declararon en desacato a la AN luego de que el cuerpo legislativo decidió incorporar a tres diputados del estado Amazonas que habían sido inhabilitados por el TSJ, y así dejó sin efecto y vetó leyes aprobadas por los parlamentarios.
Luego, Maduro, con la aprobación de la Asamblea Nacional Constituyente, cuyo objetivo era la redacción y aprobación de una nueva Constitución, ha usurpado funciones que legalmente le corresponden al Poder Legislativo.
También se indica que la ausencia de un Consejo Nacional Electoral imparcial y transparente ha facilitado a Maduro ganar espacios y obtener un segundo mandato, a pesar de que el gobernante no gozaba de popularidad. La victoria de Maduro, luego de unas elecciones amañadas donde no hubo participación de partidos de oposición, fue ampliamente cuestionada por la comunidad internacional, incluso por las denuncias referidas a coacción de electores. En medio del rechazo, el 5 de enero de 2019 Maduro es juramentado como presidente.
El 23 de enero, Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional, asume competencias del Ejecutivo luego de que el Parlamento declaró que Maduro no fue elegido en condiciones democráticas y lo señalaron de usurpar el poder.
El secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, aseguró el pasado 19 de marzo que Guaidó es la persona que fue elegida como jefe de Estado y, por ende, la Administración de Donald Trump lo reconoce como mandatario legítimo.
Historial de corrupción
El comunicado del Departamento de Estado de Estados Unidos señaló que el caso de corrupción más graveque involucra a Nicolás Maduro está relacionado con la malversación de fondos en la principal empresa del país, Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
En el texto, el Departamento recuerda que en 2015 un informe de la Red de Control de Delitos Financieros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió un fallo en el que aseguraba que un banco europeo habría aceptado “comisiones exorbitantes” para procesar unos 2.000 millones de dólares en transacciones que involucran a blanqueadores de dineros de terceros y compañías ficticias para desviar fondos de la estatal petrolera.
El documento señala que Maduro encomendó a algunas autoridades la supervisión y el control de la explotación de recursos naturales para su beneficio personal, luego de que declararó que 12 % del país forma parte del denominado Arco Minero. En 2017, Maduro tomó la decisión de expulsar a las empresas extranjeras legítimamente autorizadas para estas actividades y las reemplazó por mineros no regulados que operan con el apoyo de militares venezolanos.
El órgano estadounidense resaltó que Venezuela ocupa el lugar 169 de 180 países en el Índice de Percepción de Corrupción de Transparencia Internacional desde el año 2017.
Persecuciones
El Departamento de Estado también resalta la persecusión que Maduro tiene contra la disidencia y líderes de oposición. Se recuerda en el comunicado lo ocurrido al concejal de Caracas Fernando Albán, quien, luego de denunciar en Naciones Unidas la hostilidad del gobierno de Maduro fue apresado el 5 octubre de 2018 por agentes del Sebin. Días después murió bajo custodia cuando «cayó» del piso 10 de la sede del cuerpo de inteligencia, ubicado en Caracas. De igual modo, se señala que la Faes ejecutó a más de 100 personas entre junio y diciembre de 2018, según el registro de la ONG Provea. En esta línea, también se menciona que la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, apuntó que 37 personas fueron asesinadas por el cuerpo policial en operativos realizados en diferentes zonas populares.
El Departamento indica que Maduro también ha reprimido protestas pacíficas al ordenar a la Guardia Nacional, incluso a los grupos denominados como colectivos, amedrentar a los manifestantes. Reportes de la Asamblea Nacional señalan que, en medio de los reclamos, fallecieron al menos unos 40 ciudadanos en lo que va de 2019.
Entre las acciones de persecución, el Departamento de Estado de Estados Unidos hizo mención al allanamiento a la residencia de Juan Guaidó y el arresto de Roberto Marrero, director del despacho del presidente de la AN, quien está actualmente detenido en el Sebin.