27.7 C
Caracas
jueves, 28 marzo, 2024

Una oferta generosa que no se debe rechazar

-

Aunque la hoja de ruta trazada por el gobierno estadounidense para concretar una salida pacífica a la crisis humanitaria que vive Venezuela fue recibida por la oposición radical como preámbulo de una inminente intervención militar, y considerada por Nicolás Maduro como una burda imposición, la misma comienza a percibirse como una opción válida con el pasar de los días.

En el artículo anterior mencioné que la propuesta de Mike Pompeo podría ser la última oportunidad de Padrino López para salvar al país de la hecatombe. Igual argumenté que el plan debería por lo menos ser discutido por el gobierno de Maduro y realizar una contrapropuesta. Pues bien, el propio Elliott Abrams, comisionado de Donald Trump para Venezuela, fue quien le inyectó una bocanada de oxígeno a la propuesta de una transición pacífica al decir textualmente: “No es un plan absoluto, sino una propuesta que puede ajustarse a las necesidades políticas del país. Hay un millón de variaciones, los venezolanos podrían decir: queremos cambiar esto porque creemos que funciona mejor para nosotros. Para Estados Unidos no es una catástrofe que se cambie algo”. Pero fue más lejos al asomar la posibilidad de que el futuro Consejo de Estado puedan integrarlo personajes que han sido sancionados como Mikel Moreno y el propio Padrino López.

Esta flexibilización de la propuesta de Pompeo por lo menos interesó a Rusia, ya que la portavoz de la cancillería de ese país, María Zajárova, aunque la cuestiona porque busca un ultimátum contra Maduro y no un acuerdo nacional, dijo que su país está listo para negociar con EE. UU. una transición en Venezuela. Esta posición de Vladimir Putin sería la clave para destrabar la crisis.  

La idea de una transición pacífica siempre ha estado en el tapete desde que estalló la crisis. Hace casi un año, Nicolás Maduro, asesorado por  el gobierno de Cuba, ante las duras sanciones impuestas a ese país por los Estados Unidos, decidió iniciar un proceso de negociación con la oposición bajo el auspicio del reino de Noruega. El primer paso de Maduro fue reunirse subterráneamente con los partidos PJ, AD y un UNT, dejando por fuera VP, por ello cuando Juan Guaidó se enteró ya las negociaciones estaban avanzadas, y no le quedó más remedio que involucrarse, sin contar con el apoyo del ex asesor de seguridad de Trump, Jhon Bolton. Se discutió entonces: restablecer plenos poderes a la AN; designación de un nuevo CNE; levantamiento de sanciones y elecciones presidenciales en seis meses como los puntos más importantes.

LEE TAMBIÉN

La Butaca de Oda | Películas que podemos ver online a causa del coronavirus

La estrategia cubana tenía previsto que Héctor Rodríguez fuera el candidato a unas futuras elecciones presidenciales, en el conocimiento que las diferencias estructurales de la oposición y el desgaste de Guaidó favorecían un triunfo de Rodríguez. Pero el plan  tenía un talón de Aquiles, no fue consultado con Diosdado Cabello, que desde un principio lo rechazó, y puso como condición que él fuera el candidato del PSUV. Sin la estructura del PSUV, los cubanos sabían que no habría ninguna posibilidad de triunfo.

Mientras los cubanos y Diosdado se ponían de acuerdo, Bolton anunció la congelación de todos los activos de Venezuela en territorio de los Estados Unidos, lo que le dio razones suficientes al número uno del PSUV de acorralar a Maduro e implosionar el diálogo.

Padrino López estuvo de acuerdo con el diálogo de Noruega, que contemplaba unas eventuales elecciones presidenciales. Ahora casi un año después, en un contexto mucho más grave para el país, él como Ministro de Defensa, tiene la oportunidad de presionar para que se negocie una salida, muy honrosa para el madurismo, y que al mismo tiempo sería una gran oportunidad de sanar las heridas abiertas por esta confrontación estéril, que sólo ha servido para que los corruptos desangraran al país como lo han hecho.

LEE TAMBIÉN

La suerte de Trump y Maduro

Más allá de las bravuconadas de los amigos de Guaidó, como Carlos Vecchio que sin tener con qué, dice abiertamente que en Miraflores se negocia la cabeza de Maduro, y que la transición va porque va (así dijo con la entrada de la ayuda humanitaria), lo más importante es que hay en la mesa una oferta generosa para Maduro y su cúpula, si tomamos en cuenta el inmenso daño le ha hecho a Venezuela.

Generosa porque Elliott Abrams confirmó que todos los puntos de la propuesta pueden ser negociados. Funcionarios clave del chavismo no tendrían veto para ser parte del Consejo Federal. Las sanciones económicas se  levantarán paulatinamente. Pero lo más importante son las garantías que establecen que el alto mando militar se mantienen en sus cargos durante la vigencia del gobierno de transición, al igual que autoridades estatales y locales. Si buscaron un acuerdo en Noruega, porque no hacerlo ahora. A menos que no le tengan confianza, más allá de la cúpula militar a las FANB.

Marco Hernández es periodista y fundador de la ONG Periodistas por la Verdad@hmarcovalor

Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.

Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.

HAZ TU APORTE

Es completamente seguro y solo toma 1 minuto.

Ayúdanos a cubrir todo el país
Hazte Superaliado/a