Puerto Cabello.- Jesús Alberto Carrero nunca imaginó, en su natal Puerto Cabello, que su labor de buzo industrial desarrollada en la refinería El Palito sería parte de una experiencia que terminaría en la propia Nasa, como en efecto ocurrirá el próximo mes de julio cuando el carabobeño integre el equipo del Laboratorio de Flotación Neutral de la agencia espacial estadounidense.
Este porteño, que cursó sus estudios de primaria en el Colegio Niño Jesús, de la urbanización Tejerías, contigua a la urbanización Rancho Grande de Puerto Cabello, donde aún vive su padre, logró ser seleccionado entre más de 50 buzos, en su mayoría militares, para realizar el trabajo de pruebas a los trajes espaciales de la Nasa.
En comunicación virtual con El Pitazo, Carrero narró que en 2016 llegó a Nueva York, luego de abandonar Puerto Cabello ante la mala situación económica del país que limitaba el ingreso familiar.
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«Llegué a Nueva York sin conocer a nadie, no tenía trabajo ni papeles. Las primeras tres semanas me alojé en un shelter (lugar de refugio para desamparados), para luego iniciar una búsqueda de empleo que me hizo ayudante de construcción y lavador de platos en restaurantes de Manhattan».
Jesús Alberto recuerda que en 2019, luego de tres años de dificultades, logró legalizar su situación migratoria y pudo buscar empleo en la disciplina para la que se preparó en Venezuela: buzo industrial.
Un nuevo escollo hubo de sortear el porteño; para ganarse un empleo de buzo tenía que competir en esa profesión ejercida mayormente por militares y exmilitares de la Armada (Navy) de Estados Unidos, pero el deseo de superación y el talento del inmigrante pudieron más.
El venezolano logró entrar en un programa, luego de ser seleccionado entre más de 50 buzos (militares y exmilitares). Allí empezó su ascendente carrera que lo llevará, en el mes de julio próximo, a Houston, Texas, donde se realizarán las pruebas de nuevos trajes espaciales en una piscina que es el Laboratorio de Flotación Neutral (NBL, por sus siglas en inglés).
En esa piscina, que contiene 6,2 millones de galones de agua, estará el carabobeño como parte del personal técnico de la Nasa. En el Johnson Space Center de la agencia en Houston, los equipos están en fase de prueba de herramientas y desarrollando enfoques de entrenamiento para operaciones en la superficie lunar.
La propia Nasa ha informado que como parte de una serie de pruebas que se llevan a cabo en el Laboratorio de Flotabilidad Neutral (NBL) en Johnson, los astronautas, en una demostración del traje espacial de exploración, y los ingenieros con equipo de buceo de «casco duro» están simulando varias tareas que la tripulación podría realizar en la superficie de la luna.
De luna y estrellas
Carrero ha brindado su talento no solo a la Nasa, que lo tendrá como probador de trajes que irán a la luna en próximas exploraciones, sino que ofrece sus servicios a los yates de celebridades de Hollywood, cantantes y deportistas, quienes dan buena referencia del trabajo del porteño.
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Sus trabajos de reparación de las propelas y sistemas de propulsión incluyen los yates de Silvester Stallone, Enrique Iglesias, Madonna, Wart Horton, Steven Spielberg, Steve Jobs, Michael Jordan y Thalía, entre otros.
Muestra como uno de sus logros la decisión del Comando de Guardacostas de West Palm Beach, en Florida, que le dio la oportunidad de pertenecer a su grupo táctico antinarcótico.
Mientras espera el mes de julio para vivir la experiencia de trabajar para la Nasa, Carrero dirige su propia empresa comercial: Luz Marine Sub Solutions, de la que dice ha levantado con sacrificio, firma que tiene sucursales en Venezuela, Panamá y Estados Unidos.