Táchira.- La frontera entre Venezuela y Colombia a través del estado Táchira está cerrada pese a que los contenedores que estaban en los puentes internacionales fueron removidos. Las personas que requieren hacer alguna diligencia en el Norte de Santander deben cruzar a través de las trochas o caminos verdes.
«En estos caminos verdes cruzan en promedio, en semana flexible, 4.000 personas al día, mientras que en semana radical de 1.000 a 2000 personas. Esto quiere decir que por los caminos verdes hay un flujo importante que si cruzaran por los puentes tendríamos mayor control sanitario, aduanero y de seguridad», explicó a El Pitazo el exalcalde del municipio Bolívar William Gómez.
Gómez fue burgomaestre hasta el pasado 8 de octubre, cuando informó por estado de WhatsApp que debía renunciar por razones ajenas a su voluntad y que debía quedar en su puesto la presidenta del Concejo Municipal y candidata a la alcaldía. Por ello, asegura que sabe la dinámica fronteriza y migratoria por el municipio.
A su consideración los cierres de frontera mantienen a los comerciantes en pérdidas económicas y sin la posibilidad de mejorar su poder adquisitivo o calidad de vida.
«El pueblo fronterizo no aguanta más. Lo poco que está activo y las personas que están en la informalidad anhelan ya la reapertura fronteriza. La gente quiere ese dinamismo para volver a la formalidad y que se proyecte la economía», precisó Gómez.
El que no haya paso formal a través de los puentes internacionales, sugiere que no hay tampoco ingreso económico aduanero, no hay control migratorio sobre quiénes entran o salen del país ni protocolos de bioseguridad ante el COVID-19.
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