Al menos 46 personas murieron, varias carreteras quedaron bloqueadas y múltiples viviendas fueron «gravemente dañadas» tras el terremoto de magnitud 6,8 que sacudió este lunes, 5 de septiembre, el suroeste de China.
El sismo se registró a las 12H52 (04H52 GMT) en la región montañosa de Sichuan, indicó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por sus siglas en inglés). El epicentro se situó a 39 km del cantón de Luding, una ciudad de alrededor de 100.000 habitantes, informó la televisión pública china CCTV.
En un video difundido por la agencia de noticias oficial Xinhua se veían lámparas colgadas balancearse y trozos de edificios en el suelo. CCTV mostró imágenes de bomberos retirando piedras que bloqueaban una carretera y de un auto azul, con el parabrisas roto por una gran roca.
El temblor se sintió en varias ciudades de la provincia a unos 200 km del epicentro, entre ellas la capital regional Chengdu, que cuenta con 21 millones de habitantes, actualmente en confinamiento debido a un brote de COVID-19.
El último balance provisional del terremoto en China era de al menos 46 personas muertas, según la televisión nacional, que indicó además que habría 16 desaparecidas y 50 heridas. Ante unas cifras que podrían ir en aumento, el presidente chino, Xi Jinping, instó a «hacer todo lo posible para ayudar a las personas afectadas por la catástrofe y minimizar las pérdidas humanas», aseguró Xinhua.
Con información de Deutsche Welle