El número de muertos por los devastadores terremotos llega este jueves, 9 de febrero, a casi 19.400, de los que 16.170 se han contabilizado en Turquía y 3.192 en Siria. Además, hay unos 70.000 heridos de distinta consideración. El recuento de edificios destruidos por los temblores se mantiene en 6.444.
Pero no todo es dolor, también entre las imágenes que circulan por redes sociales y que le dan la vuelta al mundo a través de las agencias de noticias, está la cara de felicidad de personas que volvieron a ver a sus seres queridos luego de ser rescatados. También la esperanza entre aquellos que esperan que sus familiares estén vivos.
La asociación humanitaria Cascos Blancos ha rescatado a diferentes personas en distintos lugares de Siria. Entre ellos, se cuenta el niño Karam, cuya edad se desconoce. En el material audiovisual difundido se observa cuando lo sacan y el pequeño no pudo contener la satisfacción y sonríe a los socorristas.
Sus dientes resaltan de entre la pila de rocas que se aglomeran en el lugar de donde lo salvaron. La alegría del infante contagia a los socorristas, quienes celebran y ríen. El menor estuvo dos días bajo los escombros.
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Dos días entre los escombros
Por el lado turco, los socorristas hacen lo propio y han logrado salvar la vida de varios niños y adolescentes que se encontraban en un mismo edificio que se desplomó en medio del temblor en Hatay. Estuvieron más de dos días en el lugar.
Los rescates se han efectuado en distintas zonas de Turquía e incluyen al pequeño Arif Kaan, de 3 años, sacado 43 horas después del terremoto y trasladado al hospital, donde lo entregaron a su padre, a quien también salvaron.
Por su parte, la niña Masal, de un año y medio, estuvo 56 horas entre las paredes de su casa ubicada en un edificio de tres plantas que se desplomó. Los brazos de su padre la esperaban afuera.
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«Sáquenme de aquí»
La historia de otra pequeña en Siria se ha convertido en un caso viral porque protegió a su hermano durante 36 horas. Ambos estaban atrapados en el suelo de su casa. Cuando llegaron los recatistas dijo: «Sáquenme de aquí, haré cualquier cosa por ustedes«.
La pequeña se llama Miriam y su hermano Ilaaf. A la niña solo le quedaba espacio para subir un poco su brazo y dejarlo por encima de la cabeza de su hermano y así lo protegió hasta que los salvaron.
Una familia también se salvó
Los Cascos Blancos también lograron rescatar a una familia completa -incluidos dos niños- de debajo de los escombros en el noroeste de Siria, la zona más golpeada en el país por estar cerca del epicentro del sismo de Turquía.
«Un verdadero milagro, resuenan las voces de alegría alcanzando el cielo, una familia completa es rescatada de debajo de los escombros de su casa en el pueblo de Besanya, en el oeste de Idlib», indicaron los Cascos Blancos, en un video difundido anoche en su cuenta oficial de Twitter.
En el material de más de dos minutos, se aprecia cómo dos rescatistas sacan primero al padre, mientras que los otros dos niños son salvados sucesivamente de debajo de los escombros entre una gran cantidad de gente que acudió al lugar para ver el «milagro» y gritaba «Dios es grande».
El rescate se ejecutó más de un día y medio después del primer sismo de magnitud 7,7.
Los rescatistas alertaron de que las cifras de muertos o de salvataje podrían seguir subiendo, ya que muchas personas continúan atrapadas. Hasta los momentos trabajan contrarreloj para salvar a cientos de personas que permanecen bajo los escombros.