Caracas.- El presidente ruso, Vladimir Putin, no tiene miedo al líder opositor Alexéi Navalni, que fue el lunes enviado a prisión preventiva menos de 24 horas después de regresar a Rusia, aseguró este martes el Kremlin.
«Las afirmaciones relativas a que uno tiene miedo al otro son una soberana tontería», dijo el portavoz presidencial, Dmitri Peskov.
Peskov reaccionó así a la afirmación de Navalni en las redes sociales desde la misma comisaría, en la que se celebró la vista judicial de que el presidente ruso «tiembla de miedo» ante él y su pueblo.
«No hay que asociar al presidente con la violación de las leyes de la Federación Rusa», comentó Peskov.
El portavoz del Kremlin destacó que estaba al tanto de que el Servicio Penitenciario Federal (SPF) tenía algo que reclamar al opositor por no personarse ante la autoridad por un antiguo caso penal. «Fueron violadas unas reglas concretas. Si alguien incumple las reglas, entonces la policía toma medidas para restablecer el orden», adujo.
Recordó que «casi 18.000 veces en los últimos tres años se produjeron incumplimientos de las reglas del período de prueba y 18.000 veces se tomaron medidas».
El portavoz presidencia también manifestó que no hay «ninguna contradicción» por el hecho de que Navalni sea detenido y encarcelado, por una infracción que ocurrió cuando estaba convaleciente durante varios meses en Berlín después de un intento de asesinato.
Peskov destacó que el SPF mostró «flexibilidad» y «comprensión» cuando el opositor era, «en el sentido más literal de la palabra, el paciente de Berlín».
«Cuando la clínica Charité confirmó que el paciente dejó de serlo y se encontraba en un estado de salud normal, surgieron los problemas», explicó.
Consideró que Navalni estuvo «durante largo tiempo en rehabilitación», aunque los abogados del opositor mantienen que ésta no terminó hasta este mismo mes.
«Ellos serán libres de utilizar esos materiales durante el proceso judicial», comentó Peskov.
«No tiene intención de tener en cuenta la opinión internacional»
Consideró que dicho caso no exige una «especial atención» del presidente y, en alusión a las demandas de liberación de Navalni, aseguró que el Kremlin «no tiene intención de tener en cuenta la opinión internacional al respecto».
«Se trata de un hecho de incumplimiento de la legislación rusa por parte de un ciudadano ruso. Eso es un caso absolutamente interno y no permitiremos a nadie que se inmiscuya», señaló.
En cuanto a la exhortación de Navalni a sus partidarios para que salgan a la calle, comentó que el Kremlin no teme dichos llamamientos.
Navalni, que acusa a Putin de ordenar su asesinato en agosto de 2020 con el agente químico Novichok, regresó el domingo a Rusia desde Alemania, fue detenido en el aeropuerto y después recibió 30 días de arresto administrativo
El opositor cumplirá el arresto en la trágicamente famosa prisión moscovita de Matrósskaya Tishiná, donde murió en 2009 el abogado Serguéi Magnitski, que había denunciado la corrupción policial.