Bogotá.- Manifestantes volvieron a protestar el jueves #10Sep en diferentes zonas de Bogotá y de otras ciudades de Colombia contra la violencia policial, aunque hasta ahora con menor intensidad: los disturbios dejaron 10 muertos.
El blanco de las protestas fueron los Comandos de Acción Inmediata (CAI) de la Policía, que fueron atacados con piedras y otros objetos y obligaron en algunos casos a la intervención de unidades antimotines.
Alcaldesa de Bogotá: actuación policial en protestas evidencia uso desproporcional de la fuerza
De nuevo, el principal punto de concentración fue el CAI de Villa Luz, en el oeste de Bogotá, donde trabajaban los dos uniformados involucrados en la muerte del abogado Javier Ordóñez, cuya muerte avivó las protestas callejeras.
Hasta ese lugar llegaron decenas de manifestantes que volvieron a lanzar objetos contra la instalación policial y en respuesta a esta situación, miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) arrojaron gases lacrimógenos para forzarlos a replegarse.
Más enfrentamientos
Una de las situaciones más tensas se vivió en el barrio Zona Franca, en la localidad de Fontibón, también en el oeste de Bogotá, donde en un principio algunos vecinos formaron una cadena humana para evitar que atacaran un CAI.
Sin embargo, eso no evitó que comenzaran a caer piedras y palos contra la infraestructura y que se desatara un enfrentamiento entre los manifestantes y el Esmad. La situación se complicó: las personas denunciaron en las redes sociales que hubo uniformados que hicieron disparos al aire.
Violencia policial y desmanes se cobran la vida de 10 personas en Colombia
En el barrio Verbenal, en el norte de Bogotá, donde vivían dos de los jóvenes asesinados en los desórdenes del miércoles, los manifestantes llenaron de palos y objetos inflamables el CAI y le prendieron fuego como en la noche anterior.
En Bogotá perdieron la vida siete personas y tres más murieron por desmanes en la vecina localidad de Soacha.
La Oficina de la Alta Comisionada de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los derechos humanos advirtió que hubo defensores de DD.HH. detenidos por la Policía en Bogotá y en Villavicencio, capital del céntrico departamento del Meta.