Los Teques.- Un tobo de agua turbia para su consumo cada 15 días es lo que reciben las privadas de libertad del Instituto Nacional de Orientación Femenina (Inof), en Los Teques, capital del estado Miranda. Esta situación se ha agravado desde la crecida del río San Pedro, el pasado 11 de agosto, ya que afectó la bomba de agua y el tanque que surte al penal de mujeres.
Familiares de las internas denunciaron a El Pitazo, este lunes 13 de septiembre, que son castigadas por hacer los reclamos a la directiva. «No permiten que les llevemos agua y la directiva solo les da un tobo para su aseo personal y su consumo, sin prever que pueden enfermarse», dijo María Mata, tía de una interna.
La vocera de los familiares pidió a los representantes del Ministerio de Servicio Penitenciario abrir, nuevamente, una investigación sobre el tema del suministro de alimentos. «Solo comen arroz con zanahoria o remolacha; es lo único que les preparan de comida», agregó.
Denunciaron que la comida que le dan en el penal no tiene ni sal. «Ellas dicen que cada semana llegan camiones de pollo y carne, pero eso nunca se lo preparan», explicó Mirna Guevara, madre de una privada de libertad.
Indicó la denunciante que es necesario que las autoridades determinen qué destino le dan a esa mercancía. En junio de 2020 fue destituida la directiva del penal por el desvío de los alimentos que eran suministrados, por lo que una comisión enviada desde el Ministerio de Asuntos Penitenciarios tomó el control del lugar.
“Cuando ellas reclaman son castigadas severamente y agredidas verbal y físicamente”. Señaló, además, que cuando hacen requisas les destruyen sus pertenencias.
Por otro lado, Guevara indicó que hay al menos dos decenas de presas que tienen libertad desde hace seis meses y no les han dado sus respectivas boletas, por eso piden la asistencia de una comisión de Revolución Judicial como la que visitó los centros de detención preventiva.
Agregó que a través del 0800 medicinas llega al recinto carcelario todo tipo de fármacos, “pero se pueden estar muriendo con un dolor y no les dan ni una pastilla”.