La cinematografía finlandesa presenta la obra de terror La maldición del bosque, la ópera prima de los cineastas Joonas Pajunen y Max Seeck. Esta película, que llega al país de la mano de Mundo D Película, transporta al espectador a un lugar donde la naturaleza cobra vida de manera siniestra.
Finlandia, como muchos países europeos, está lleno de folclore y vastos bosques, lo que lo convierte en un escenario ideal para el terror. El largometraje aprovecha este entorno para abordar temas ecológicos a través del eco-horror, convirtiéndose en uno de los aspectos más llamativos del audiovisual. La ambientación en los bosques, con su atmósfera escalofriante, sirve como el telón de fondo para explorar cómo la naturaleza puede protegerse de aquellos que la amenazan.
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Con una duración de aproximadamente 87 minutos, mantiene un ritmo constante que mantiene al espectador en vilo. La historia sigue a Mikko, María y Matilda, tres hermanos que regresan a la casa de su infancia 15 años después de que su padre fuera asesinado y su madre desapareciera. Los recuerdos traumáticos resurgen y el ambiente comienza a presentar situaciones inexplicables, obligando a los protagonistas a confrontar sus miedos y dudas.
Pekka Strang, Inka Kallén y Saana Koivisto son los encargados de protagonizar esta producción, en la que se revelan las complejidades y conflictos internos de una familia disfuncional, llevando la trama hacia su máximo clímax.
La oscura y trágica historia familiar consume lentamente a los hermanos, mientras el bosque se manifiesta tejiendo un entramado de horror y desesperación. La secuencia final, bañada en una luz carmesí y cargada de simbolismo, lleva al espectador a través de una experiencia inmersiva.
La maldición del bosque plantea si los sucesos son fruto del pasado o de algo más oscuro y malévolo, o si la naturaleza misma, en su afán de protegerse, puede convertirse en la mayor amenaza.